10 Ejemplos de Enlaces Covalentes

En química, los enlaces covalentes son aquellos en los que dos átomos se unen compartiendo sus electrones de valencia. Se producen generalmente en las moléculas que contienen no metales, dado que estos tienen más electrones disponibles en su última capa. Los enlaces covalentes suelen producirse entre átomos del mismo elemento, aunque también entre distintos no metales. Por lo mismo, sus moléculas tienden a ser estables y neutras.

Los enlaces covalentes son usualmente más fuertes que los enlaces iónicos, porque los iónicos se pueden romper en una hidrólisis (ruptura por acción del agua al formar soluciones acuosas) y sólo son producidos por las cargas electrostáticas que generan los electrones de valencia. En los covalentes, hay una fuerza de atracción sostenida por los electrones compartidos entre los dos átomos que participan.

Enlaces covalentes en química orgánica

Los enlaces covalentes predominan en la química orgánica, en la cual el elemento carbono es capaz de formar gran variedad de cadenas de sus mismos átomos con este tipo de enlace. La valencia de +4 del carbono será cubierta por enlaces carbono-carbono C–C, y completada por átomos de hidrógeno en enlaces C–H. Gracias a la hibridación del orbital sp del carbono, es posible que se formen enlaces covalentes dobles y triples.

Los enlaces simples son llamados enlaces sigma σ, y son acompañados por enlaces pi π para que se formen los dobles y triples. Los tres tipos de enlaces covalentes están en sustancias que se encuentran en los tres estados de la materia, y determinan las propiedades físicas y químicas de estas. El punto de ebullición disminuye si hay enlaces dobles o triples en las cadenas con el mismo número de carbonos. Ejemplo: el propeno CH2=CH–CH3 hierve antes que el propano CH3–CH2–CH3.

La electronegatividad

Una de las propiedades químicas que intervienen en la formación de un enlace covalente es la electronegatividad. Es la capacidad que un átomo tiene de atraer a otros para unirse, dado el número de electrones que el primero tiene en la última capa. Los no metales tienen más, de 4 a 7, por lo que tienden más a recibir los electrones de los metales para completar su regla del octeto (ocho electrones en la capa de valencia).

El elemento más electronegativo es el flúor (F); esta propiedad tiene un valor de 4.0 en él, siendo la máxima en toda la tabla periódica. El elemento que tiene la menor electronegatividad es el cesio (Cs), con un valor de 0.7. Debido a estas notables diferencias, surgen fuerzas que se inclinan hacia un extremo de la molécula, lo que propicia que sea más reactivas o solubles en ciertos solventes. Hay por ello dos tipos de enlaces covalentes: polares y no polares.

Tipos de enlace covalente

Los enlaces covalentes se clasifican según la diferencia de electronegatividades que haya entre los elementos que los forman, en los siguientes tipos:

  • Enlaces covalentes polares
  • Enlaces covalentes no polares

Enlaces covalentes polares

Los enlaces covalentes polares se caracterizan porque las electronegatividades de los elementos que lo forman son distintas, por lo que las fuerzas son desiguales en ese punto de la molécula. Se forman por tanto dos polos en el compuesto. Uno que está atrayendo los electrones del enlace, y otro afectado por dicha atracción. Las sustancias que tienen enlaces covalentes polares son generalmente solubles en agua y otros disolventes.

Enlaces covalentes no polares

Los enlaces covalentes no polares o apolares son aquellos en que las electronegatividades de los átomos que lo forman son iguales, lo que produce una uniformidad en las atracciones en toda la extensión de la molécula. Cuando una molécula es no polar, es insoluble en agua y otros disolventes. Es incapaz de separarse en algún punto porque se encuentra estable. Estas fuerzas se pueden alterar cuando se halla un enlace doble o triple. La molécula se debilitará formando así dos extremos.

Los hidrocarburos son los compuestos polares por excelencia. Se trata de cadenas que están formadas por enlaces carbono-carbono C–C, y en los que la valencia del carbono está completada por átomos de hidrógeno en enlaces C–H. Todas las fuerzas de atracción se distribuyen de manera uniforme por toda la cadena, sin variación. Otras sustancias no polares son los gases como el nitrógeno N2, el oxígeno O2, el cloro Cl2 y el flúor F2, que se presentan como moléculas diatómicas.

30 ejemplos de moléculas con enlaces covalentes

  1. Metano CH4
  2. Etano CH3–CH3
  3. Propano CH3–CH2–CH3
  4. Butano CH3–CH2–CH2–CH3
  5. Nitrógeno N≡N
  6. Fósforo P≡P
  7. Oxígeno O=O
  8. Hidrógeno H–H
  9. Flúor F–F
  10. Cloro Cl–Cl
  11. Bromo Br–Br
  12. Yodo I–I
  13. Amoníaco NH3
  14. Alcohol metílico CH3–OH
  15. Alcohol etílico CH3–CH2–OH
  16. Dióxido de carbono O=C=O
  17. Agua H–O–H
  18. Sílice o dióxido de silicio O=Si=O
  19. Pentacloruro de fósforo PCl5
  20. Tricloruro de fósforo PCl3
  21. Diclorodifluorometano CCl2F2
  22. Diesel C12H23
  23. Glucosa C6H12O6
  24. Metilamina CH3–NH2
  25. Etilamina CH3–CH2–NH2
  26. Propilamina CH3–CH2–CH2–NH2
  27. Butilamina CH3–CH2–CH2–CH2–NH2
  28. Ácido fórmico H–COOH
  29. Ácido acético CH3–COOH
  30. Ácido propiónico CH3–CH2–COOH

Sigue con:

Citar en formato APA:
Del Moral, M. (2023, 12 de enero). 10 Ejemplos de Enlaces Covalentes. 10ejemplos. https://10ejemplos.com/10-ejemplos-de-enlaces-covalentes/

8 comentarios en «10 Ejemplos de Enlaces Covalentes»

Responder a juan Cancelar la respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.